jueves, 27 de noviembre de 2014

Santo Tomás de Aquino, el hombre y la mujer.

Santo Tomás de Aquino era unos de los teólogos más influyentes de la Era Medieval. Vivió en un tiempo en el que se excluyó a la mujer de los ministerios ordenados. Tenía claro que la mujer era de naturaleza inferior al hombre, lo cual en este tiempo no podemos comprender. Esta idea de Tomás de inferiorizar a la mujer es algo que le lleva a ser criticado por muchos, sobre todo por el sexo femenino, aunque se puede entender que Tomás solo se limito a reflejar lo que fue la opinión general de su época. Es difícil que cualquier sacerdote católico de nuestra época no conozca la obra de Santo Tomás de Aquino. A continuación voy a mostraros algunos de sus firmes ideas acerca de los sexos masculinos y femeninos según Tomás de Aquino:
- Dios creó primero al hombre, haciéndolo el origen del resto de la humanidad.
- Dios creó a la mujer del hombre y para el hombre-
- Dios creó al hombre a su imagen en todo el sentido del término, dado que Dios es la fuente de todo.
- La semilla del hombre contiene a un futuro niño.
- Cuando nace un hombre, el nacimiento es perfecto.
- Hablando en forma estricta, cada mujer es un monstruo de la naturaleza.
- El hombre tiene mayor poder de razón que la mujer porque Dios lo preparó para la actividad intelectual.
Estas solo son algunas de las afirmaciones que en su día se le atribuyen a Tomás de Aquino. Yo no se vosotros pero yo como mujer no estoy de acuerdo en ninguna de ellas. Gracias a Dios el tiempo ha pasado y las ideas son ahora diferentes.



   

El mito más famoso de la historia

Uno de los mitos más famosos de la historia que nos podamos encontrar es el mito de la caverna de Platón.
En esta historia, Platón cuenta que en una cueva se encontraban unos prisioneros los cuales habían sido obligados a observar unas sombras que se originaban por el resplandor de un fuego y unos objetos que se morían. Esta sería la primera metáfora, donde el autor identifica a estos prisioneros como el alma humana encadenada a un cuerpo terrenal, perteneciente al mundo de las cosas, que es sensible e imperfecto, donde los conocimientos no son más que sombras de la realidad.  
En este mito, Platón se cuestiona lo que ocurriría si algunos de esos prisioneros se pusieran en pie y fuese capaz de ver los objetos reales y el fuego, comprendiendo que lo que veía antes eran solo sombras. Y si subiera a la superficie le pasaría algo parecido. Esto sería una liberación por la cual el ser humano deja al mundo sensible para llegar al mundo ideal, que se palpa perfecto y eterno, y al que solo se puede entrar por medio de la razón y el alma.
Este mito identifica también a la caverna como el mundo de las cosas, dentro de un aspecto mas bien epistemológico. En tal caverna existen imitaciones de lo que seria la superficie (a esto llamaremos el mundo de las Ideas) pero imperfectas y también engañosas: lo que sería las sombras reflejadas en la pared son imitaciones de las sombras que pertenecen a un objeto de la superficie, y el fuego no es otra cosa que la imitación al Sol. Entonces los prisioneros tan solo pueden conocer lo que pueden ver, que no es otra cosa que sombras,que ello identifican con la realidad.
Entonces si uno de los prisioneros lograra ascender hacia la superficie, podría allí contemplar el panorama del mundo exterior, el mundo de las Ideas. Primero vería las sombras, luego objetos que se reflejan en el agua, los objetos mismos, el cielo en la noche, y en último caso el Sol, que identifica como la idea del Bien. Este conocimiento adquirido seria entonces el conocimiento verdadero, el cual Platón llama Episteme.

Un poquito sobre mí


Hoy en día a la filosofía no se le da la importancia que se le debería, por ello quiero contribuir con este blog para publicar desde él diferentes entradas relacionadas con este maravilloso mundo.
Soy una estudiante de bachillerato, mi nombre es Estefanía Paniagua Madrid, y espero que os resulten interesantes mis publicaciones.